Podemos decir adiós cuando el dolor se transforma en paz, cuando el extrañar se transforma en recordar.
Estoy rodeada de ¡Beeps!
Estoy rodeada de Beeps. El Beep del refri cuando lo dejo abierto y me recuerda que lo debo cerrar. El Beep de mi carro cuando tengo personas u otros vehículos cerca y me ayuda a no estrellarme, o cuando me avisa que mis llaves se quedaron adentro...