Estoy rodeada de ¡Beeps!

by | Jan 26, 2022 | A mis treintaytantos | 1 comment

Estoy rodeada de Beeps. El Beep del refri cuando lo dejo abierto y me recuerda que lo debo cerrar. El Beep de mi carro cuando tengo personas u otros vehículos cerca y me ayuda a no estrellarme, o cuando me avisa que mis llaves se quedaron adentro (normal).  Además de los benditos Beeps preventivos o de recordatorio, también está el sutil Beep de la lavadora de platos que me anuncia que los platos ya están limpios o del horno que me indica que la comida esta lista. Estos Beeps definitivamente hacen mi vida más fácil. (Algunos dirán que así sustentamos nuestra distracción, pero ese es tema de otro post).

Quisiera que mi cerebro tuviera un Beep integrado…

Beep! ya llevas más de 15 minutos en Instagram y no, no has aprendido nada. (Por aquello que digo que también aprendo cosas nuevas en esa plataforma).

Beep! Beep! Estas a punto de recibir un mensaje de WhatsApp que te va a causar mucha ansiedad. (Así al menos me da tiempo asimilarlo antes).

Beep! Beep! Beep! Muy pronto el estrés, frustración e impotencia se acumularán en tu espalda formando nudos de tensión. Beep! Beep! Beep!  

Empecé el 2022 queriendo hacer todo lo que no pude hacer en el 2020, tratando de organizar todo lo que empecé (y no termine) en el 2021 y queriendo como que dejar atrás a la brevedad posible todo lo que he sentido en estos últimos años para por fin volver a ser más “productiva” con mi tiempo, mi familia, la casa etc. etc. etc.

Así como la bebida famosa de los noventas, Slimfast, mis primeras semanas del año han sido un trago amargo de DoEverythingFast :

Organizar el blog, planeación de podcasts. CHECK. (work in progress).

Pitchear proyectos de PR consulting y freelance writer. CHECK. (ahí la llevo).

Mis hijos inscritos en sus clases extracurriculares de todo lo que quieren y necesitan (según yo). CHECK.

Beep! 

Empezar proyectos de la casa ASAP (Sin divorciarme en el intento, porque ay güey jaja ) CHECK.

No faltar a las practicas y jueguitos de tennis para estar lista para Liga. CHECK.

Citas de todo y CHECK UPS anuales. CHECK.

Beep! Beep! 

Adelantar la limpia de closets, cambiar el Spring Cleaning a New Year Cleaning porque mis hijos crecen por segundo y las modas cambian y aunque no quiero dejar de ponerme mis skinny jeans creo que los puedo dejar descansar por un rato… CHECK.

Planear viajes para ver a la familia que llevamos rato aplazando, qué podemos y queremos hacer, qué es prudente planear… (planear jajaj esa palabra que nos encanta y ya llevamos con tantos planes yéndose a la mierda desde el 2020). CHECK.

Agregar dates con mi esposo, para acordarnos que nos caemos muy bien y nos gustamos y así. CHECK.

Beep! Beep! Beep!

Hacer un update digital de todo. (Que delicia es salirte de chats en los que tu no aportas o que no te aportan y borrar fotos que ni al caso). CHECK.

Hablar y por fin ver a todas mis amigas que por estar ocupada o por la ansiedad del virus. (De ellas o mío, porque si no son ellas soy yo la que “me estoy cuidando” del Covid verdad). CHECK.

Leer con mis hijos todas las noches y no se me puede olvidar que ahora tengo que mandarles otro snack al colegio. (Se me acaban las ideas y tiempo). CHECK.

Actualizarme con los libros de mis clubs. (Además de los que leo o escucho por mí misma). CHECK.

Vitaminas, ya tengo casi cuarenta ¿No necesito tomarme algo más? Mejor agrego yoga otra vez a mi combo de ejercicio… por qué el yoga cura todo. CHECK.

Checar lo de la inscripción al curso de e-cornell que le traigo ganas porque es importante actualizarme profesionalmente. CHECK.

Beep! Beep! Beep! Beep!

Leer noticias diariamente que me hacen casi casi perder la esperanza en la humanidad. Un bebe de 3 meses encontrado muerto en el basurero de un penal en México, que han matado a 3 periodistas mexicanos, la violencia hacia las mujeres que va en aumento, ver el video de una mamá en Estados Unidos amenazando llegar armada al colegio de sus hijos si los obligaban a usar tapabocas para estudiar. Fucking CHECK.

Recibir emails todos los días de casos de COVID en el salón de mis hijos. CHECK.

Beep! Beep! Beep! Beep! Beep!

Hubiera estado bien padre tener esos Beeps avisándome que era too much antes de que mi espalda no estuviera echa nudos. ¿Por qué se me ocurre que puedo “solucionar” el resto del año en tan solo 2 semanas?  Con razón ya me cansé y todavía no termina enero. 

Yo sé que los Beeps mentales los pueden reemplazar hoy los celulares, las Alexas, los IWatches, y para los que nos gusta lo tangible, las agendas con sus stickers de “Be Here Now” “Trust the Process” y todo ese rollo. Pero ya fue too late para mí. Lo bueno, (porque ahora me tengo más auto compasión y no me clavo en el pasado) es que me cayó el veinte en enero de cómo quiero vivir mi 2022 y no es tratando de hacer la pandemia a un lado, o pretendiendo que con calendarios y agendas puedo tener el control de mi vida, porque la realidad es que no. 

Mejor respiro, disfruto y me meto a la tina con agua caliente a quitarme estos nudos en la espalda. 

Compartir
Subscribe
Notify of
0 Comments
Inline Feedbacks
View all comments

Artículos más recientes

Un San Valentín lleno de Amor (Propio)

Mi amiga Heidi Herfurth es editora de la revista VIVA! The Woodlands Magazine. Me invitó a escribir un artículo para su edición de Febrero y aquí comparto lo que se publicó en la revista. Te recomiendo leer la edición completa aquí: https://bit.ly/VivaFebMarzo23 Un...

El primer beso homosexual 

El primer beso homosexual que vi fue a mis 17 años en Barcelona. Me acuerdo perfecto porque estaba con mis amigas caminando por Las Ramblas mientras teníamos nuestro verano de backpackers al viejo continente. Era finales de los noventa cuando vi a dos...